Territorio Voraz — Xabier Iraola — Omnivoraz

Territorio Voraz

Un artículo de Xabier Iraola Agirrezabala.

Dicen de los gallegos que uno no sabe si suben o bajan por la escalera en la que te los encuentras. Que te responden con otra pregunta y que, a pesar de su clima húmedo, son reacios a mojarse por algo, o al menos, por algo que merezca la pena.

Pues bien, conocí a estos emprendedores voraces y gallegos que ahora saltan a la palestra comunicativa con un hambre voraz y un menú rural ciertamente atractivo, en otro medio sectorial y me atrajeron a su redil por su enfoque amplio y transgresor, cuya valentía desbordaba los márgenes de las páginas y, al parecer, la paciencia de los amos.

Al igual que en un medio sectorial agrario hay que abordar y tener en cuenta toda una serie de realidades y factores colaterales que condicionan, muy mucho, la cuestión sectorial, echar a rodar un medio con el que abordar el mundo rural en su dimensión más amplia no es tarea fácil, puesto que muchas veces, incluso los que vivimos en el rural, no somos conscientes de dónde se hallan los linderos de lo nuestro.

Ahora que tan de moda está la despoblación y la España Vaciada parece ser más un lema «marketiniano» que vale para multitud de cuestiones, remedios, planteamientos políticos y proyectos de soluciones imposibles, conviene ser prudentes en el enfoque y ambiciosos en las metas para tratar la delicada situación de nuestros pueblos de la llanura, estepa y montaña que se desangran, poquito a poco, en silencio, sin armar mucha bulla.

Territorio Voraz — Xabier Iraola — Omnivoraz

Por todo ello, en este saludo, desde la Vasconia, visto lo visto, leído y conocido en otras latitudes, no quisiera dejar pasar la oportunidad de subrayar la importancia de la ordenación territorial como herramienta imprescindible, a medio-largo plazo obviamente, para hacer frente a la tendencia mayoritaria e imparable de la concentración de la población en las urbes y garantizar, al menos facilitar, el mantenimiento de las gentes en ciudades y pueblos medios, cercanos y accesibles a los núcleos más rurales, donde se garanticen, por ley, los servicios públicos que hacen posible la vida familiar.

Frente a unas ciudades que aspiran o fagocitan la población de los pueblitos, es más necesario que nunca, que las administraciones tomen cartas en el asunto, dejen de ponerse de perfil ante los problemas e impulsen la legislación y normativa necesaria para lograr que la ordenación territorial restañe las heridas territoriales que el mercado y la inercia histórica han dejado traspuesta la piel de toro.

Estimados amigos de OMNIVORAZ: Seguid siendo voraces y descarados. Lo necesitamos.